domingo, 13 de junio de 2010

Falsos fans... ¡Qué haría sin ellos!

Y después de una temporadita de dejar abandonado (más si cabía) este humilde blog, me encuentro con la grata sorpresa de una cifra indecentemente alta en el contador de visitas. Añado la palabra indecente porque personalmente no creo que tenga muchos asiduos; no es que quiera quitarme méritos, pero soy realista.

De hecho, he estado cavilando acerca de su repentino éxito, y no he tardado mucho en darme cuenta de a qué se debía... ¡A la cantidad de pervertidos que hacen sus búsquedas en Google! ¡Porque sinó no me lo explico!

En mi último post me hacía eco de una queja compartida en Asco de vida . Supongo que ha sido debido al sustancioso contenido de ésta que más de 1000 enfermos hayan decidido entrar para ver lo que se cuece por aquí. He de decir que hasta me siento halagada, y que estoy considerando el incrementar el contenido cerdaco para reunir a incautos súbditos de los cuales sacar una cifra sumatoria más en mi triste contador. Pero no puedo limitarme a escribir cosas como "mi novia ha dejado que me corriera en su boca" para atraer a las masas, otra vez no...

Supongo que lo de tener más o menos seguidores depende más bien de si les gusta o no como escribes, pero sobre todo del tiempo que quizás no debieras dejarlos abandonados... Sorry, no es nuevo esto de que sea una inconstante...

Pero bueno, tengo falsos fans, ¡qué más puedo pedir!
¡Camarero!

Un kappuchu merecido para todos ellos